Saber como poder iniciar correctamente un procedimiento legal es importante en cualquier momento de nuestra vida. Sobre todo si somos víctimas de atropellos que necesitan ser tratados mediante un juicio.
Es debido a esto que en este artículo te vamos a decir todo lo que tienes que conocer acerca de cómo iniciar un procedimiento legal. Así que si te ves envuelto en algún caso, te sugerimos que te quedes hasta la parte final de este artículo.
¿Qué es exactamente un procedimiento legal?
El método judicial es la manera en que se concreta la actividad jurisdiccional y constituye el componente dinámico del proceso. El proceso o proceso judicial es el grupo de los actos jurídicos llevados a cabo para utilizar la ley en la resolución de un caso.
Por lo cual el método judicial está formado por la conjunción y coordinación de diferentes actos jurídicos que cuentan con soberanía procesal. Además, el propósito final del método es la producción del impacto jurídico final propio del proceso, o sea, está formado por los actos de inicio, desarrollo y conclusión del mismo.
En conclusión, el método judicial es el instrumento que poseemos a nuestro alcance para lograr ejercer nuestros propios derechos y proteger nuestros propios casos. Por lo cual, una vez que se da una situación en la que requerimos la participación de la justicia, se desarrollará esta clase de método.
Asimismo, conforme con la Ley de Enjuiciamiento Civil se establecen 2 criterios para decidir qué clase de juicio es aplicable conforme el caso en específico. Uno es dependiente de la materia que se trate y el otro de la cuantía de la reclamación.
Por igual, se establecen 4 tipos de métodos judiciales que poseen diferentes particularidades dependiendo de los asuntos que se tramitan en ellos.
Los 4 tipos existentes son:
Juicio verbal.
Juicio monitorio.
Juicio cambiario.
¿Qué derechos vas a tener en un procedimiento judicial?
Una vez que te enfrentas a un método judicial tienes una secuencia de derechos entre los que tenemos la posibilidad de descubrir:
Derecho a la tutela judicial positiva: Tiene interacción con poder ser parte en un proceso y a obtener una resolución motivada que tenga relación con los intereses pretendidos.
Derecho de protección: O sea, poder contar con todos los medios de custodia a lo largo del desarrollo del método que salvaguarden, de manera directa, los derechos de los que somos titulares y los intereses que nos están afectando.
Derecho al Juez ordinario establecido por la Ley: Este derecho trata de asegurar la libertad e imparcialidad de los órganos de la jurisdicción. Por lo cual son las leyes las que determinan la jurisdicción y competencia del órgano para cada caso en específico.
Derecho a la ayuda de Letrado: Como ya comprendemos, todos poseemos derecho a custodia, por lo cual, por igual, poseemos derecho a obtener los servicios de un jurista, con libertad de nuestra situación económica, de manera que se garantice el equilibrio de oportunidades entre los litigantes.
Derecho a ser comunicado de la queja formulada: O sea, nuestro derecho a ser informados de los cargos que pesan en nuestra contra y de esta forma poder defendernos de ellos.
Derecho a un proceso público: Así se previene que existan probables arbitrariedades y como bien muestra la Constitución: “las actuaciones van a ser públicas con las excepciones que prevean las leyes de procedimiento”.
Derecho a un proceso con cada una de las garantías: Cada una de las piezas del método judicial tienen que tener equidad de oportunidades procesales, teniendo derecho a que continuamente sé de la imparcialidad del Juez y el respeto inicialmente de inmediación.
¿A qué se debe la necesidad de iniciar un procedimiento legal?
Antes de la presentación de la demanda, o sea, la puesta en marcha del artefacto judicial, los individuos damnificados. Estos poseen otros recursos que tienen la posibilidad de acortar los procesos y obtener satisfacción a sus requerimientos.
Son las denominadas gestiones extrajudiciales, en algunas ocasiones son obligatorias, como en los conflictos laborales, en los cuales se obliga una instancia de participación. En la mayor parte de las legislaciones, dichos métodos de conciliación permanecen reglamentados por las leyes y al mando de mediadores registrados frente a los órganos judiciales.
Si las gestiones extrajudiciales no conducen a un resultado satisfactorio, se inicia el proceso por medio de la presentación de la demanda. Luego de todos estos conocimientos nuevos, vas a poder estar mucho más tranquilo a la hora de iniciar un procedimiento legal en cualquier momento